La plaza del Bailadero de Quintanilla de Onésimo, donde los árboles llevan abrigos de ganchillo en invierno, es el escenario elegido por el Velo Club Delicias para comenzar la primera parte de la segunda etapa de la Vuelta a Valladolid 2019.
Contrarreloj con sorpresa
Todos los dibujos, las fotografías que miramos, no dejan de ser representaciones de la realidad, maneras de reducir para entender. Mira uno el trazado de la contrarreloj del sábado y piensa en algo recto y llano. La verdad es que los ciclistas que sobrevivan a la primera etapa deben enfrentarse a un recorrido que, 700 metros después de tomar la salida, empieza a picar. Hacia arriba durante dos kilómetros, suben los protagonistas la cuesta de La Yesera. Tres, ahora sí, llanos y giro frente a las instalaciones de Bodegas La Planta. Vuelta en sentido inverso y bajada, claro, hacia la plaza de Quintanilla. Respira y recupera. Si tienes el vale, te invito a comer.
Algo ligero
Los equipos tienen asignados dos restaurantes. La Maña, N-122, en el cruce que desde Valladolid te lleva a Traspinedo. Y La Espadaña, el restaurante que Bodegas Emina regenta en San Bernardo, cerca de Valbuena de Duero. La gente de las motos, los que quieren hacer fotos, van a comer en Quintanilla, en el Mesón. El destino gastronómico del personal de organización son las Bodegas Arzuaga. Sin tiempo para ver a los ciervos, toca volver a Quintanilla, salida del segundo sector de la segunda etapa de la Vuelta a Valladolid.
Valbuena de Duero
En este pueblo, cercano a Peñafiel, se celebra uno de los triatlones más bonitos, por el enclave en el que se desarrolla, de Castilla y León. El sábado, a poco más de las cinco de la tarde, verá pasar a los ciclistas girando a la izquierda, camino del primer paso por Bodegas Emina. Carretera llana hasta la Meta Volante de Pesquera de Duero. Comienza entonces una subida que podría hacer daño. Se trata del Premio de la Montaña de la jornada, por el que se pasa dos veces.
Bajada
La parte más espectacular del recorrido se sitúa en el descenso que ha de llevar a los corredores hasta Valbuena. Si mis datos son correctos, esta cuesta es la que suben los triatletas en el tramo de bici. Aunque, en esta segunda etapa de la Vuelta a Valladolid la bajada es mucho más larga y técnica. Un buen lugar para aguardar en la cuneta y animar. Dos kilómetros después, la meta en Bodegas Emina.
Etapa corta y con mucha miga, más teniendo en cuenta el esfuerzo de la mañana… y la final del domingo.
